La limpieza dental profunda, también conocida clínicamente como Raspado y Alisado Radicular (SRP), es un procedimiento que se realiza para tratar la Enfermedad Periodontal (Enfermedad de las Encías).
Empecemos por comprender la anatomía de los dientes y el tejido que los rodea.
La parte visible del diente cuando sonreímos se llama corona dental, y la raíz está debajo de la encía. Debajo de la encía, se encuentra el hueso que soporta tanto la encía como los dientes. Los dientes están unidos al hueso por ligamentos. El hueso, la encía y los ligamentos constituyen el periodonto. Por lo tanto, la enfermedad periodontal significa que esas estructuras han sido afectadas.
La razón más común por la que se produce la enfermedad periodontal es la placa y el cálculo. El primer paso de la enfermedad periodontal es la gingivitis, cuando la placa y el sarro se acumulan por encima de la línea de las encías, la encía se inflama para proteger el periodonto de las bacterias.
Para revertir la inflamación, es necesario realizar una limpieza dental regular (profilaxis). Si la inflamación continúa, los ligamentos que sujetan los dientes al hueso empiezan a romperse, el hueso también empieza a romperse creando un hueco entre la encía y los dientes. A medida que la placa y el sarro crecen en esta brecha, el hueso comienza a romperse aún más, haciendo que esta brecha sea más profunda.
Para saber si se necesita una limpieza profunda, se realiza un sencillo procedimiento llamado sondeo durante las revisiones rutinarias o las limpiezas dentales periódicas.
Se introduce un instrumento delgado marcado en medidas milimétricas en el hueco entre los dientes y la encía. De 1 a 3 milímetros de espacio se considera un periodonto sano; 4 milímetros es la zona gris, y 5 milímetros o más significa que la encía ósea y los ligamentos ya han sido afectados.
Los signos que indican que se necesita una limpieza dental profunda son:
1. Medidas de la sonda (por encima de 4 mm)
2. Cálculo visible bajo la línea de las encías observado en las radiografías
3. Sensación táctil de cálculo con instrumentos dentales
4. Inflamación
5. Sangrado
Las limpiezas profundas suelen hacerse por cuadrantes y se utiliza anestesia local para la comodidad del paciente.
Después de eliminar todo el cálculo bajo la encía, se coloca localmente un antibiótico en cada hueco donde la medida es superior a 4 milímetros.
El antibiótico apretará la brecha y reducirá el espacio de 1 a 3 milímetros. Después de realizar una limpieza profunda, el paciente es puesto en citas de mantenimiento cada 3 meses para evitar que la placa y el cálculo vuelvan a crecer en este hueco.
El cumplimiento de la higiene dental en casa es imprescindible para reducir también la acumulación de placa y sarro.
Si se planifica una limpieza profunda y el paciente no cumple con el procedimiento, se produce un daño mayor en el periodonto, esto incluye recesión de encías, movilidad y pérdida de dientes.
Una vez que las medidas de la sonda alcanzan los 7 milímetros o más, se recomienda un abordaje quirúrgico por parte de un periodoncista.
La enfermedad periodontal es irreversible, pero puede prevenirse con citas regulares de higiene dental y poniendo de su parte en casa.